11 julio 2007

SANTIAGO DE CHILE

INFORMACION UTIL


RECORRIENDO LA CIUDAD
En Taxi




SANTIAGO DE CHILE


Los taxis en Chile son de color negro con techo amarillo. No tienen paraderos fijos, por lo que es posible abordarlos -de día y de noche- en cualquier esquina. Las unidades cuentan con taxímetro y la "bajada de bandera" tiene un valor inicial de 150 y 170 pesos (tarifa diurna y nocturna), cargándose 80 pesos cada 200 metros.

En ciudades como Santiago el servicio de taxi tiene varias modalidades, como son:

-Taxi colectivo, las unidades cubren recorridos fijos igual que los autobuses. Tiene capacidad para cinco pasajeros y las tarifas se anuncian en el parabrisas. Se les identifica por el letrero que llevan en el techo.

-Radio taxis, el servicio es pedido a través de la vía telefónica. La unidad recoge al pasajero a la hora y el lugar que este le indique. También se les puede abordar en la calle, como si se tratara de un taxi convencional. Operan las 24 horas.

-Taxi de turismo, sus paraderos suelen encontrarse muy cerca de los hoteles. Brinda un servicio de mayor calidad, pero las unidades -pintadas de azul- no cuentan con taxímetro, por lo que el precio se debe acordar previamente.

Buses Urbanos

Se les conoce con el nombre de "micros". Las unidades son amarillas y blancas y en el parabrisa llevan un número que sirve para diferenciarlos. La tarifa del pasaje normal es de 3.10 pesos.


Metro

Es el medio de transporte urbano más eficiente, rápido y seguro de Santiago. Opera de lunes a sábado desde las 6:30 horas hasta las 22:30, domingos y feriados desde las 8:00 horas hasta las 22:30 horas.
Las tarifas varían de acuerdo a la hora en que se aborde el metro. De 7:15 a 9:00 y desde las 18:00 a 19:30, el valor del boleto es de 400 pesos; de 6:30 a 7:15, de 9:00 a 18:00 y de 19:30 a 22:30, la tarifa se reduce a 320 pesos.
El servicio de metro de Santiago cuenta con tres líneas:
-Línea Roja, de poniente a oriente, atravesando el Centro. Recorre la avenida B. O'Higgins, avenida Providencia y la avenida Apoquindo.
-Línea Amarilla, del centro al sur poniente. Transcurre por la Gran Avenida.
-Línea Verde, del centro al sur oriente. Transita a lo largo de la avenida Vicuña Mackenna.


CLIMA
En cualquier época del año, Chile ofrece algo especial a los ojos del turista. En primavera (septiembre a noviembre) Santiago y la zona central del país se muestran espléndidos, mientras que el verano (diciembre a marzo) es ideal para disfrutar de las playas de Viña del Mar y de los parajes naturales del Parque Nacional Torres del Paine, en la Patagonia Chilena.

El invierno (junio a agosto), por su parte, es la época preferida de los amantes del esquí y el snowboard, quienes no dudan en deslizarse en las pistas de esquí de los valles nevados, localizados en las afueras de Santiago, la capital del país.

En general, el clima chileno varía en cada región geográfica. En el norte, donde se extiende el famosísimo desierto de San Pedro de Atacama, los días son cálidos (27° C promedio en verano y 22° C en invierno) y las noches extremadamente frías (pudiendo descender hasta -0° C).

La región central, Santiago, presenta un clima mediterráneo, con lluvias entre mayo y agosto, siendo la temperatura promedio anual de 14° C; mientras que el viento, la lluvia y la nieve son fenómenos cotidianos en la Tierra del Fuego y la Patagonia Chilena.

En la isla de Pascua el clima está influenciado por los vientos y las corrientes marinas, siendo la temperatura promedio anual de 20° C, con lluvias breves durante todo el año, siendo mayo el mes con mayores precipitaciones pluviales.

De otro lado, en el archipiélago Juan Fernández la temperatura promedio es de 15,4° C y una humedad relativa del 76,5 por ciento. La mejor época para visitar Chile Insular, es de octubre a febrero, cuando las lluvias decrecen considerablemente.


SANTIAGO DE CHILE
Una ciudad cosmopólita se erige en la orilla del río Mapocho. Una ciudad que palpita agitación en su variopinta geografía urbana, salpicada de barrios tradicionales que tientan a la nostalgia y modernos edificios de líneas vanguardistas extraídos del futuro. Así es Santiago, la capital de Chile, una de las metrópolis financieras más importantes de América Latina.
Calles con aromas del pasado. Avenidas que conducen al futuro. Santiago vibra, seduce y encandila. Es un gigante urbano de 5 millones de personas. Un gigante tenaz y luchador que no cesa de crecer. Un gigante algo olvidadizo que casi no recuerda que alguna vez fue sólo un puñado de manzanas desperdigadas bajo el cerro Santa Lucía.
Eso fue hace siglos, cuando Pedro de Valdivia funda Santiago de la Nueva Extremadura el 12 de febrero de 1541, sin soñar siquiera que esa pequeña villa que 6 meses después sería atacada por los aguerridos mapuches, se convertiría en el corazón político, cultural, administrativo y económico, de uno de los países más dinámicos y progresistas de Sudamérica.
En su devenir histórico, la flamante urbe fue atesorando una serie de joyas arquitectónicas, que obligan a recorrerla con detenimiento para descubrir construcciones espléndidas, como la Casa Colorada, edificación colonial de 1769 convertida en museo, el Palacio de la Moneda (1805), de estilo neoclásico y sede del gobierno chileno, además de su hermosa iglesia Catedral, construida en 1785.
Otros puntos de interés son sus extensos parques y el majestuoso Museo de Bellas Artes, inaugurado en 1910, una pincelada de sobriedad que contrasta con la atrevida arquitectura de los modernos edificios y la atmósfera bohemia de los barrios tradicionales, donde cualquier motivo es válido para matar el tiempo en un café.
Pero la capital de Chile (543 m.s.n.m.) no sólo resulta atractiva por sus contrastes arquitectónicos entre el pasado y el presente; o por su inagotable agenda cultural, sino por sus hoteles lujosos y sus provocadores restaurantes, en los que se puede disfrutar de una deliciosa empanada o un apetecible pastel de choclo, amén de suculentos platillos de pescados y mariscos, o degustar sus ya célebres vinos.

Es todo lo contrario, la ciudad, por su ubicación entre balnearios y macizos andinos bañados de nieve, es un punto perfecto para recorrer congeladas y excitantes pistas de esquí, localizadas a no más de 50 kilómetros, o visitar las refrescantes playas de Viña del Mar, en la cercana Valparaíso.
Dotada de un agradable clima mediterráneo -con una temperatura promedio de 14°C - Santiago también ofrece a sus visitantes, sus "embriagadoras" rutas del vino, fascinantes circuitos por diferentes valles, en los que no sólo se podrá degustar de una exquisita bebida, sino nutrirse de la cultura chilena y compartir un buen trago con su gente.


ATRACCIONES

Plaza de Armas, es el corazón de la ciudad y fue diseñada por Pedro de Valdivia. Alrededor se encuentran la Catedral, la Real Audiencia, el Correo Central -anteriormente fue la vivienda del conquistador- y la Municipalidad de Santiago. Al caer la tarde se convierte en el punto de reunión y descanso de jubilados, inmigrantes y transeúntes comunes y corrientes, quienes se disipan alimentando a las palomas o, simplemente, pierden el tiempo bajo las frescas sombras de árboles frondosos.

Iglesia Catedral de Santiago, la construcción del templo actual -el cuarto, porque los tres anteriores fueron destruidos por terremotos e incendios- fue iniciada por el gobierno de Ortiz de Rosas, entre 1748 y 1775, en el mismo lugar que escogiera Pedro de Valdivia, el fundador de la ciudad.
En su cuarta restauración intervino Joaquín Toesca, quien finalmente le dio a la Catedral una unidad arquitectónica, con características entre clásicas y barrocas.
En su interior se puede admirar tres naves, dos laterales y una central de mayor altura, así como su techo en forma de bóveda de cañón corrido.
También son relevantes su altar mayor-traído de Munich- de mármol blanco con aplicaciones de bronce y lapislázuli, la capilla del Santísimo Sacramento, semejante a la de San Juan y San Pablo Mártires, que se encuentran en Roma; además de los órganos, púlpitos y asientos de altar de caoba tallada, que datan del siglo XVIII. Fue declarada Monumento Nacional en 1951 y alberga en su interior el Museo de Arte Sagrado.

Palacio de la Real Audiencia o Museo Histórico Nacional, fue construido entre 1804 y 1807. La obra estuvo a cargo de Juan José de Goycolea, quien le imprimió un estilo neoclásico con elementos toscanos. Fue inaugurado en 1808 y durante la colonia fue sede de los tribunales. Posteriormente, sirvió de escenario para el accionar de la Primera Junta de Gobierno que proclamara la independencia de Chile.
En 1911 se creó el Museo Histórico Nacional, con más de 12 mil piezas, distribuidas en 16 salas, que resumen los diferentes periodos de la historia de Chile. Fue declarado Monumento Nacional en 1969.

Municipalidad de Santiago, se encuentra en el lado norte de la plaza, en el mismo lugar donde en tiempos coloniales funcionara el Cabildo, asiento del Gobierno de Chile, y posteriormente la cárcel. La primera construcción fue hecha en 1670 y reedificada en 1790. Destruida un siglo después como consecuencia de un incendio, fue restaurada entre 1892 y 1895, siguiendo diseños de la época.

Palacio de la Moneda, es la sede del Gobierno y de la Presidencia de la República. De origen colonial, fue ordenada su edificación por la Corona Española a fines del siglo XVIII, estando su diseño a cargo del arquitecto italiano Joaquín Toesca, quien dirigió la obra entre 1784 y 1799, imprimiéndole un estilo neoclásico y austero a la vez.
Originalmente albergó la Casa de Acuñación de Moneda, pero al proclamarse la independencia, se convirtió en la Residencia de los Presidentes de Chile.

Casa Colorada, es la vivienda colonial en mejor estado de toda la ciudad. Localizada en la calle La Merced 860, fue construida en 1769 por don Mateo de Toro y Zambrano, un próspero comerciante quien le compró a la Corona Española el título de Conde de la Conquista.
La hermosa casona fue construida durante toda una década y rompió los cánones arquitectónicos de la época. Fue la primera en tener dos pisos y una fachada de ladrillos cubierta de piedra. Esa no era la única novedad, el primer nivel estaba destinado a las labores comerciales de la familia, reservando la segunda planta como vivienda.
En 1978, la Casa Colorada, llamada así por su frontis rojo, fue declarada Monumento Nacional. Dos años después, se convirtió en el Museo de Santiago, con siete salas, que exponen en forma cronológica la historia de Santiago, desde los tiempos de los araucanos hasta hoy.

Palacio Cousiño, es una mansión de estilo versallesco de elegante diseño, con líneas armoniosas, sobrias y elegantes, que sintetiza los intereses, gustos y formas de vida de la elite social chilena a fines del siglo XIX e inicios del XX.
Fue construida por el progresista y potentado aristócrata don Luis Cousiño, quien encargó al arquitecto Paul Lathoud, la construcción de una majestuosa casona que le hiciera honor a su esposa, doña Isidora Goyenechea y, de paso también, honor a su fortuna, una de las más grandes del país.
Posee una impresionante sala de doble altura, con una escalera de mármol, así como amplios salones y un comedor con mobiliario original. Su decoración es igual de suntuosa, con rejas de hierro, finas maderas, terciopelos, brocados y sedas en las murallas.
En 1941, la mansión y gran parte de su mobiliario fueron adquiridos por la Municipalidad de Santiago, convirtiéndose más tarde en museo y alojamiento de ilustres visitantes como el general De Gaulle y el Mariscal Tito, entre otros. En 1968 sufrió un incendio, dañándose seriamente el segundo y tercer piso, posteriormente restaurados.
El Palacio, declarado Monumento Nacional, se encuentra en la calle Dieciocho 438.

Estación Mapocho, actualmente es el Centro Cultural más grande del país, albergando en sus salas las más diversas manifestaciones artísticas y culturales.
En realidad, se trata de la antigua estación de ferrocarriles que unía Santiago con las ciudades de Mendoza, al norte del país y el puerto de Valparaíso, y funcionó como tal desde 1913 hasta 1987.
Su construcción estuvo a cargo del arquitecto chileno Emilio Jequier, formado académicamente en Francia, por lo que estuvo fuertemente influenciado por el estilo del afamado Gustavo Eiffel, resultando el acero el elemento central de su obra.
Al dejar de funcionar como estación, estuvo abandonada hasta que empezaron los trabajos de remodelación para ser convertida en un importante centro cultural, labores que concluyeron en 1994 con pocas modificaciones, tratando de respetar en lo posible su diseño original. Esta localizado en Balmaceda 1215

Iglesia y Convento de San Francisco, es el edificio más antiguo de Santiago y la única muestra de arquitectura del siglo XVI que existe en la ciudad. Su fundación se realizó en 1554, cuando llegaron los primeros franciscanos procedentes del Perú.
En su altar mayor se encuentra la Virgen del Socorro, traída por el mismo Pedro de Valdivia, siendo la primera imagen religiosa en llegar a Chile. También destaca su artesonado dorado y policromado de influencia mudéjar, además de otras figuras religiosas de la época colonial.
El convento alberga en el primer piso el Museo de Arte Colonial, que exhibe valiosas colecciones de pintura, imaginería, cerrajería y orfebrería, entre otras importantes reliquias, como numerosos cuadros de grandes proporciones, que representan la vida de San Francisco de Asís y que, según los especialistas, son las mejores muestras de pintura cuzqueña del continente. Está localizado en Londres 4 con Alameda, en el Barrio Paris-Londres.

Basílica de La Merced, la actual iglesia es la tercera que se construyó luego del derrumbe de las dos anteriores a causa de terremotos que golpearon la ciudad. Se edificó entre los años de 1736 y 1760, aunque sus principales esbozos arquitectónicos, al igual que la catedral, fueron realizados por el arquitecto Joaquín Toesca, a fines de ese siglo.
En su interior destacan tres amplias naves y se puede apreciar valiosas obras de arte, como el púlpito, un hermoso tallado del siglo XVIII, además de la imagen de la Virgen de la Merced, traída en 1548 por el padre Antonio Correa. Asimismo, aquí se encuentran los sepulcros de importantes personajes históricos.
Cuenta con un museo formado por tres salas, con valiosas piezas de imaginería y objetos religiosos, así como una de las colecciones más completas de la Isla de Pascua. Está localizado en la calle Mac Iver 341.

Iglesia de Santo Domingo, antes de este templo existieron tres edificios anteriores, derribados por tres fatídicos terremotos. La construcción del actual recinto de estilo neoclásico e influencia criolla, se inicio en 1747, estando a cargo del arquitecto Juan de los Santos Vasconcellos, siendo terminada en 1796 por Joaquín Toesca.
En su interior se puede admirar un conjunto de pinturas coloniales de Santo Domingo, además de la imagen de la Virgen de Pompeya, quien recibe la ofrenda de sus numerosos fieles los jueves. Es considerado Monumento Histórico y esta localizado en la calle Santo Domingo 961, en la esquina de 21 de Mayo.

TOURS:
RUTA DEL VINO
Bodegas, casas patronales y campos repletos de vid, son algunas de las paradas indispensables en la ruta cargada de historia y cultura, de sabores y aromas. Aquí, en cada paso, se conoce un detalle que revela los fraganciosos secretos y los exquisitos pormenores en la fabricación del vino chileno, uno de los mejores del mundo.
Y es que desde la plantación de la primera vendimia en la ciudad de Copiapó, por iniciativa del conquistador Francisco Aguirre en el siglo XVI, mucho y muy buen vino ha corrido por las bodegas chilenas, "sembradas" en los valles cercanos a Santiago, donde la tierra es pródiga y el clima es generoso, ideal para el cultivo de la vid.
La capital es el corazón de la región vitivinícola. Al recorrer sus valles, no sólo se conoce el proceso de elaboración y se regocija al paladar con exquisitos tintos y blancos, sino que también se descubre la tradicional vida rural del hombre chileno y se recorren las elegantes casas patronales, edificadas a inicios del siglo XX.
Una experiencia divertidamente "embriagadora", en la que se evidencia el avance de la industria vitivinícola chilena, que ha sabido conjugar la riqueza de sus valles (donde se siembran finas cepas europeas) con la aplicación de tecnología francesa y el aporte de reconocidos enólogos. El resultado es más que evidente: vinos de innegable calidad y de reconocido prestigio mundial.
El Valle de Maipo, donde se encuentran inmensos viñedos, como el de Cosuño Macul (el más antiguo del país); Concha y Toro, uno de los principales exportadores; y, el Undurraga, tradicional viña familiar, son las rutas favoritas de los devotos del vino; aunque no son las únicas. Santiago ofrece mucho más.
Un recorrido cargado de buen sabor. ¡Salud!... ¿con un Merlot, un Cabernet un Souvignon, un Sauvignon Blanc o un Chardonnay? Usted escoge, usted disfruta, usted es un pasajero más en la ruta del vino.

VALLES DE NIEVE
Todo es nieve al arrojarse por esa pendiente que resplandece; entonces, el viento gélido golpea tu cara y puedes sentir como la adrenalina se apodera de tu cuerpo, reduciendo el temor y cualquier amago de arrepentimiento. Estás esquiando y te sientes libre. Eres un devoto más del deporte de las nieves.
Esta experiencia fantástica, que antes parecía ser exclusividad de los países nórdicos, también puede sentirse en las afueras de Santiago, la capital de Chile, que con sus más de 4000 mil kilómetros de Cordillera, cuenta con espléndidas pistas de esquí, consideradas las mejores de Sudamérica.
Los principales centros de esquí se localizan en la cordillera central de los Andes, a escasos kilómetros de Santiago. Las pistas de nieve están enclavadas en medio de hermosos paisajes, entre los 2,400 m.s.n.m. y los 3,300 m.s.n.m., y, además de su innegable calidad, gozan de una excelente infraestructura y fácil acceso.
En la "ruta de la nieve", existe algo más de una veintena de pistas, hechas para disfrutar de las sensaciones extremas; pero eso no es todo, además de esquiar se puede practicar snowboard, heliski y helisurf, en la temporada que se extiende desde la quincena de junio hasta la quincena de octubre.
No hay excusas para no dejarse llevar por la pendiente nevada. Sea una tarde, un día o una semana, la experiencia siempre será inolvidable. Tampoco importa si se es experto o novato, aquí hay lugar para todos; incluso uno puede matricularse en una escuela de esquí, en la que se aprenden los secretos de este deporte excitantemente congelado.

Los principales centros de ski en Chile son :

La Parva : Pueblo de montaña ubicado a 38 Km. De Santiago, cuenta con 30 excelentes pistas, alojamiento e pequeños hoteles , arriendo de departamentos y refugios. Cuenta con todos los servicios necesarios para los visitantes: restaurantes, escuela de ski, cafetería, renta de equipo, estacionamientos, discoteca y clínica. Sus pistas se unen a las de Valle Nevado por medio de la compra de un ticket especial.

El Colorado y Farellones : Ubicado a 32 Km. De Santiago, está formado por 2 villas , El Colorado y Farellones y un terreno esquiable de 40 Km. Con 22 anadariveles. En los poblados encuentra pequeños hoteles, arriendo de departamentos , restaurantes, escuelas de ski , arriendo de equipo, pub, discoteque y todo lo necesario para el visitante. Sus pistas se unen a las de Valle Nevado por medio de la compra de un ticket especial.

Portillo : Se sitúa a 149 km de Santiago por la ruta internacional a Mendoza, atravesando el valle de Los Andes. Portillo es uno de los centros invernales más famosos de Sudamérica y el único que ha sido sede de un Campeonato Mundial de Esquí. En sus canchas se ha batido el récord mundial de velocidad. El centro se caracteriza por su nieve polvo durante gran parte de la temporada, sus excelentes pistas y su inigualable paisaje de alta montaña junto a la laguna del Inca. Cuenta con un hotel de lujo, Hotel Portillo , con capacidad para 500 pasajeros. El hotel cuenta con todas las comodidades de un hotel de lujo, piscina temperada , restaurantes , escuelas de ski , arriendo de equipo y otros. : Ubicado a solo 60 Km. De Santiago en la cordillera de los Andes, cuenta con 3 hoteles de lujo y departamentos. Su infraestructura de 29 pistas se une a las de los vecinos centros de Ski de La Parva y El Colorado , formando la mayor área esquiable de Chile, con excelente nieve.

Termas de Chillán : Ubicado en la cordillera de los Andes, a 400 Km. Al sur de Santiago y a 87 Km. De la ciudad de Chillán. Ubicado en las faldas del volcán Chillán, con sus pistas entre bosques nativos, es uno de los centros mas atractivos y con mejor infraestructura hotelera de Chile . Cuenta con hoteles de lujo, arriendo de departamentos, centro termal y Spa además de todas las facilidades para los visitantes por el día. Sus 28 pistas y 9 andariveles son de inigualable belleza.

Centro de Ski Volcán Villarrica : A 18 Km. De Pucón en el sur de Chile, ubicado dentro del parque Nacional Villarrica.Sus pistas están ubicadas en las faldas del volcán Villarrica con espectacular vista del lago Villarrica a sus pies. El centro cuenta con 9 andariveles, restaurante, bar, escuela de esquí, arriendos de esquí y snowboard, chocolatería, posta, policlínico, tienda en el refugio y servicio de cafetería.
Cuenta con alojamiento en Pucón y sus alrededores. Este centro cuenta con la ventaja de estar ubicado en una de las zonas mas turísticas de Chile, rodeado de Parques Nacionales, termas y múltiples opciones para el turismo.




VIÑA DEL MAR
Playas y jardines. Sosiego en las mañanas soleadas, agitación bohemia en las noches placenteras. Viña del Mar: una ciudad serenamente encantadora. Viña del mar: cuerpos bronceados y orillas barridas por el Pacífico. Viña del Mar, el balneario más importante de Chile y uno de los principales de América del Sur.

Solaz interminable en playas refrescantes y paseos de serenidad por calles plenamente matizadas de verdes, que convierten a Viña del Mar en una "Ciudad Jardín", con parajes de ensueño como la Quinta Vergara, la laguna Sausalito o el Jardín Botánico Nacional.

Edificios nuevos y antiguos, infinidad de parques y jardines, hermosas mansiones, lujosos hoteles y hasta un casino, completan el paisaje urbano de esta ciudad costera, fundada el 29 de diciembre de 1874, por el ingeniero José Francisco Vergara Echevers.

Destino ineludible. Parada segura a 9 kilómetros al noroeste de Valparaíso. Viña del Mar, un reducto del sol, una ciudad y un balneario donde la brisa proveniente del Pacífico, anuncia el infinito ir y venir de las olas.


VALPARAISO
Un abrazo eterno entre pasado y presente. Una equilibrada mezcla de perfiles arquitectónicos creados por el hombre y líneas trazadas por la naturaleza se conjugan en Valparaíso, una ciudad encantadora y bohemia con funiculares que incansables suben y bajan de cerros "sembrados" de pintorescas casas, un puerto cosmopolita que acoge a barcos trotamundos y unas playas deliciosas engreídas del Pacífico.
Así es Valparaíso. Así es ahora y así será siempre, porque pueden cambiar muchas cosas, pero nunca la esencia de una ciudad que surgió sin acta oficial de fundación, de un puerto que en el siglo XIX se nutrió del intercambio cultural y comercial con curtidos "lobos de mar" del viejo continente, de un rincón de Chile que se jacta de tener uno de los primeros ferrocarriles de Sudamérica.
Cuenta los historiadores de Valparaíso -capital de la región del mismo nombre- que la ciudad no tiene fecha exacta de fundación, aunque más de uno le atribuye ese honor al español Juan de Saavedra, quien en 1576 llegó a dichas tierras capitaneando a un puñado de indígenas changos.
Rodeada de los cerros Concepción y Alegre y bañada por el océano, la ciudad que ahora es Patrimonio Histórico de la Humanidad, tuvo su esplendor en el siglo XIX, debido a interminables intercambios comerciales con Europa, principalmente con Italia, Inglaterra y Francia. Por eso, sus calles muestran características especiales, con algunos edificios a la usanza antigua y otros envanecidos de modernidad.
Valparaíso, con más de un millón 500 mil habitantes, es el "puerto de Santiago" y el más importante de Chile. El detalle pintoresco es que cuenta con una red de funiculares, que permiten subir los cerros que, naciendo cercanos al puerto, están poblados de coloridas viviendas erigidas en todo lo alto, acaso para observar el encanto de su bahía y su puerto.
Ciudad al desnudo. Ojos clavados en una urbe influyente en el campo económico y cultural, localizada a 115 kilómetros al noroeste de Santiago, la capital chilena; una urbe que -según recomendación de los viajeros- debe ser descubierta a partir del muelle Prat, donde atracan barcos y lanchas de todas las banderas y tamaños.
El recorrido debe continuar por la Plaza Sotomayor y su monumento a los héroes de Iquique, uno de los combates navales de la Guerra del Pacífico. El rosario de atractivos se extiende y parecen de nunca acabar. Ahí están el Congreso Nacional -antes funcionaba en Santiago- las plazas Victoria, Sotomayor y Aníbal Pinto, el Museo de Historia Natural, el Museo Naval, la Catedral y el Paseo Muelle Barón.
Pero Valparaíso no es sólo una ciudad; es también una región con siete provincias (incluido el archipiélago Juan Fernández y la mismísima Isla de Pascua) y 38 comunas, en las cuales se pueden desarrollar una serie de deportes de aventuras como andinismo, esquí, caza y deportes náuticos, entre otros.
De todo y para todos los gustos, en una ciudad porteña, nostálgica y bohemia, en la que hasta las olas del mar parecen componer versos y el viento recita historias lejanas, mientras los funiculares ascienden por milésima vez a los cerros habitados y un hombre -quizá usted- contempla la interminable belleza del Pacífico.
http://www.enjoy-chile.org/chile/informacion-util-chile.php

No hay comentarios.: